Está de moda, al parecer, hablar y teorizar sobre el TaiJiQuan, el QiGong, etc.
Si bien es una parte importante...Los conceptos básicos, el cómo una postura de tal o cual manera afecta o puede afectar a determinados canales de Qi o al órgano, o a la relajación de ésta o aquella articulación, cadena muscular, etc. Esto puede deberse a que es un producto de como el profesor ha de apañárselas para que esos "estudiantes" poco amigos del trabajo puedan acercarse a la práctica desde un punto de vista teórico, y con suerte no llenar sus mentes con quijotadas y dedicarse a una práctica consciente.
Indudablemente la teoría es necesaria, pero seguro no más allá de una explicación de cómo realizar el ejercicio en sí. Quiero decir, no es la teoría la que nos debe llevar a la práctica, si no una vez realizado el ejercicio comentar, hablar, charlar sobre él.
La mejor teoría sobre cómo conducir un auto es, sin duda, ponerse a los mandos. Con unos simples consejos preliminares que que mandos accionar y para qué.
La mejor teoría de como nadar es, sin duda, en el agua. Salvo unos conceptos básicos de como hay que mover las extremidades.
Las teorías de cómo se puede mejorar, avanzar, mayor eficiencia, etc vienen después de la práctica, como breves consejos o en conversación, que nos lleva de nuevo a la práctica.
Creo que había un dicho chino referente a esto que decía que vale más un minuto de práctica que cien años de teoría.
Esto no quita que hablemos en la mesa. En la mesa.
Recuerdo hace años, mi maestro me regaló un libro de TaiJiQuan, "Forma y función" tardé meses en leerlo. La última frase del prólogo decía "no hay secretos en las artes marciales chinas, sólo entrenar". Cerré el libro y me puse a practicar. Ya te digo, tardé meses en volver a abrir el libro.
La práctica te da la perfección.
Bueno, menos bueno ... Ha de verse la disciplina de tu trabajo.
Javier Mesa.